lunes, 10 de marzo de 2014

XI RUTA BTT EXTREMA PUERTO DE LA CABRA



Este es el cartel con el que bailamos hoy.  Hay una palabra que define la ruta acertadamente y destaca en el cartel: "extrema".  Si alguien se pregunta si esta palabra está bien puesta en el cartel o por el contrario es un mero reclamo para atraer a los masoquistas de la mtb, les tengo que decir que sí.  Incluso pienso que se quedaron cortos. Muy cortos. Y la dureza de la ruta muy laaaargaaa.
Tan sólo  nos inscribimos, de los Dieztreinta digo, Miguel y yo. El resto, una parte de obligaciones familiares, otra de imposibilidad por trabajo o por baja forma les impide venir. De cualquier forma no por eso dejamos de estar como en familia.  Los Ruteros fueron el club participante con mas inscritos y con ellos salimos Domingo sí y jueves tambien. Tampoco puedo olvidar que gracias a ellos pudimos formalizar la ficha federativa, y así constamos en ella.  Oficialmente participamos como Ruteros, aunque despues nuestro corazón es de los Dieztreinta.
La crónica de la ruta, la empezamos en el campo de futbol de Quintana de la Serena.



Nos recibe un hervidero de gentes. De Don Benito,muchísimos, los Ruteros ya mencionados, Los perdíos, a las once en casa y mas que ahora no recuerdo.  Vienen de todas partes de Extremadura hasta completar mas de 170 participantes.
 Los preparativos de la equipación es nuestra primera urgencia.  Preparar las bicis, los zapatos...
Con la ropa tenemos el primer dilema.  Como siempre hay dos tendencias, aquellos que van de corto y tan sólo con un maillot y otros como nosotros, que nos ponemos hasta la chaqueta térmica de invierno.  Dudamos.  Al final nos decidimos por algo intermedio, un maillot de manga corta y cortavientos.  La ruta nos dará la razón.  La salida hasta la salida es neutralizada desde el campo de futbol.








Por fín salimos.  En este punto me acuerdo de que habia llevado dos pares de guantes y que con el cambio de ropa de última hora los olvidé en el coche   No es momento para volver. Joeerrr.... Pero bueno, hoy por hache o por que no hizo demasiado frío tampoco me acorde despues.
Los primeros kilómetros se hacen a buen ritmo, estamos llaneando y el grupo se estira.  No podemos olvidar que es una prueba libre, no neutralizada, y que algunos de los participantes van a competirla.  No me parece mal. La primera gracia la vemos desde lejos

                                                                                         Foto de Joaquin Viera
La subida es tremenda.  Los primeros pies a tierra se producen.  En ocasiones por muy bien que vayas se forma un tapón  que te obliga a parar.  Despues es muy complicado inciar la marcha con esta pendiente.  Miguel y yo la tomamos con tranquilidad pero no paramos.  Hicimos bien en tomarla con filosofía. Visto lo vivido más tarde.  A partir de aquí no tenemos excesiva dureza  y llegamos bien hasta la caseta de la Cabra, donde tenemos la sorpresa siguiente

Pepe,Angel, Malpica, Victor y Miguel por orden en la fotografía
Tan solo tres han quedado esta mañana para salir de ruta, vienen subiendo desde el helipuerto. Buena ruta.  Nos tomamos el avituallamiento  con ellos y con pena los dejamos  para continuar con la nuestra. Llevamos unos 20 kms y nuestro siguiente paso es la cuesta del infierno.  Vamos comentando la dureza de esta cuesta en la bajada por el camino del helipuerto. Cuando por fín llegamos, la cuesta no nos decepciona.  Durísima, larga y con vueltas que impiden ver el final.  Cuando crees que en el siguiente recodo va a terminar todavía se empina un poco más. Por fín llegas al cemento y como premio la subida hasta el mirador de la cabra. A estas alturas se hace realmente duro.  Arriba el reposo del guerrero y unos bocadillos con fotos nos animan y hacen olvidar el dolor de espalda y piernas.







Buen avituallamiento. Llevamos unos treinta kms. Si sale la cuenta, quedan 20.  Bajamos y nos mezclamos con un grupo de Berlanga, siguiendo la estela de los ruteros.
-Hey vosotros:  Si habeis pensado que lo duro se ha acabado con el mirador estáis equivocados.
 Tenemos un buena bajada.  Pero como comprobamos, despues de una gran bajada, lo siguiente es una gran subida.   Tengo en la cabeza una fotografía no realizada en la que decenas de mtb  subimos  en fila con el molinete puesto por un camino en el que sólo se puede ir por un estrecho carril. La serpiente multicolor mezclada con el verde jara.  Una pena las fotos perdidas. Como la canción de los besos,  ¿dónde van las fotos que no hacemos. En algún momento en nuestro futuro, tendremos un chispazo  y esta fotos no realizadas iluminarán nuestra gris existencia.
 La ruta no deja respiro alguno, no hacemos más que bajar y subir.  Vamos comentando que aún  queda  de duro duro la cuesta que pasamos al principio y que tenemos que desandar.  Nos equivocamos de nuevo, como tantas veces hoy. Antes de llegar a esta tenemos otras dos durisimas donde la gente se tira de la bici ya molidos.  Nosotros aguantamos como jabatos sin bajarnos en ninguna de ellas, pero....
 El pero, es una cuesta escondida que nos asalta tras una bajada a mano derecha.  Lo primero que vemos es una procesión de mtb subiendo a pie y a duras penas. Tengo que decir que lo intentamos.  No fuimos capaces.  Entre la cantidad de gente en el camino que no dejaba pasar y el cansancio ponemos pie a tierra.   Es muy duro en estas condiciones mantenerse en la bici cuando todo tu cuerpo: los pulmones, las piernas, la espalda y el alma, no hacen más que rogarte un respiro. Echamos pie a tierra a mitad de cuesta y nos sentimos por un momento derrotados.
Pero la derrota en una ruta como está, tan sólo es definitiva con el abandono y nosotros estamos muy lejos de abandonar.  Tenemos otra bajada espectacular y peligrosa,  hay un grupo de chicas animando.  Esto eleva la peligrosidad natural de la cuesta.  En lugar de frenar con sensatez, los aplausos y gritos de animo hacen que  sueltes frenos y vueles sobre el pedregal.  Eso si, la adrenalina casi te asfisia y cuando termina la cuesta y llegas a terreno seguro, no sabes si reir o llorar.

Hemos terminado el terreno escarpado y pensamos que  lo siguiente es el paseo triunfal hasta la meta. Mmmmm.   No acertamos.  El aire toca ahora. Vamos con las ganas de llegar y apretamos y sacamos de los musculos la ultima reserva de glucogeno que les queda.  LLegamos satisfechos pero muy cansados. Muy cansados pero satisfechos.
Despues del avituallamiento, la ducha, la cervecita, la convivencia en el restaurante de la piscina con la comida.  Lo pasamos bien.  Los premios a Los Ruteros por ser el Club más numeroso, el premio a Joaquin por ser el llegado a meta de más edad.  Los sorteos premian a varios Ruteros  de los que pongo fotos. También las fotos que me pasa Joaquín de la comida.
Antes de venirnos felicitamos a los organizadores de la Ruta. Lo han hecho realmente bien.
Por supuesto que la dureza de la Ruta no va a hacer que el año próximo desistamos de participar.  Más bien lo contrario.  No se me va de la cabeza la cuesta  en la que puse pié a tierra.  El año próximo....


















                                                                                                                                                                   Cronica por Pp@gu@



No hay comentarios:

Publicar un comentario